miércoles, 9 de diciembre de 2009

CONTRABANDO

El árbol del conocimiento era el árbol de la razón.
Por eso es que probarlo
nos arrojó del Edén. Esa fruta
era para secar y moler hasta volverla un polvo fino,
un condimento para usar una pizca a la vez.
Probablemente Dios tenía pensado hablarnos
más adelante de este deleite nuevo.
Y  nos llenamos la boca,
atragantándonos de pero y cómo y si,
y de nuevo pero, sin saber.
Resulta tóxico en grandes cantidades, los vapores
se nos enroscaron en la cabeza y a nuestro alrededor
en una nube densa que endureció como acero,
un muro entre nosotros y Dios, Que era el Paraíso.
No es que Dios no sea razonable, es que la razón
en semejante exceso fue tiranía
y nos encerró entre sus límites, una celda lustrada donde
se reflejaban nuestros rostros. Del otro lado
de ese espejo vive Dios,
pero a través de la hendija donde la valla no alcanza
a tocar el piso, se las arregla
para colarse –una luz que se filtra,
esquirlas de fuego, una música que se oye,
se pierde, y después se oye otra vez.


Versión en castellano de Sandra Toro



Contraband

The tree of knowledge was the tree of reason. / That's why the taste of it / drove us from Eden. That fruit / was meant to be dried and milled to a fine powder / for use a pinch at a time, a condiment. / God had probably planned to tell us later / about this new pleasure. / We stuffed our mouths full of it, / gorged on but and if and how and again / but, knowing no better. / It's toxic in large quantities; fumes /swirled in our heads and around us / to form a dense cloud that hardened to steel, / a wall between us and God, Who was Paradise. / Not that God is unreasonable – but reason / in such excess was tyranny / and locked us into its own limits, a polished cell / reflecting our own faces. God lives / on the other side of that mirror, / but through the slit where the barrier doesn't / quite touch ground, manages still / to squeeze in – as filtered light, / splinters of fire, a strain of music heard / then lost, then heard again.







©Denise Levertov (Evening Train, New Directions Publishing Corporation, 1993).




















































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