sábado, 31 de octubre de 2015

LA VIGILIA

Cuando los ratones se despiertan
y salen a hacer su trabajo de buscarse
la vida, las migas de la vida,
yo me siento en silencio en el cuarto de atrás
intentando calmar mi mente de su parloteo,
rumores y sucesos, y encontrar
vida, migas de vida, para nutrirla
hasta que, replegado en la quietud,
desde el santuario del desorden
habla        el dios animal           Ay,
pobres ratones— No les dejé
nada para ellos, ni pan,
ni grasa, ni un plato sin lavar.
Váyanse por las paredes a otras cocinas;
acá hagamos silencio.
Voy a sentarme en vela
a esperar al Gato
que con lengua humana
profiera oráculos inhumanos
o con sus garras, abra delicadamente
las cajas chinas, cada una de las cuales
contiene el Mundo y su sombra.



Versión en castellano de Sandra Toro





The Vigil

When mice awaken
and come out to their work of searching
for life, crumbs of life,
I sit quiet in my back room
trying to quiet my mind of its chattering,
rumors and events, and find/
life, crumbs of life, to nourish it
until in stillness, replenished,
the animal god within the
cluttered shrine speaks. Alas!
poor mice – I have left
nothing for them, no bread,
 no fat, not an unwashed plate.
Go through the walls to other kitchens;
let it be silent here.
I’ll sit in vigil
awaiting the Cat
who with human tongue
speaks inhuman oracles
or delicately, with its claws, opens
Chinese boxes, each containing
the World and its shadow.







©Denise Levertov (Collected Earlier Poems, 1940-1960, New Directions Publishing Corporation, 1979).