viernes, 25 de noviembre de 2011

EL MÉTIER DE FLORECER


Muy ocupado creciendo- así está
el amarilis. Creciendo, de noche
sobre todo: haría falta
un poco más de paciencia de la que tengo
para sentarse sin sacarle los ojos de encima hasta el amanecer,
cada hora se puede registrar el aumento de altura
a simple vista. Como un chico con la espalda contra la puerta
que supera orgulloso la marca del año anterior,
siempre hacia arriba
cada tallo verde, suave, opaco,
con matices de un violeta rojizo, y a lo largo
estrías verticales casi imperceptibles:
Por cada bulbo, dos tallos robustos,
a veces con hojas sólidas por compañía,
elegante barrido de aspas de puntas romas.
Y en lo alto, los brotes grávidos brillando en plenitud.

Una mañana – ¡y tan pronto!- mientras estás despierto
se abre la primera flor. O la encontrás suspendida
en un breve y único
instante de vacilación.
Al día siguiente, otra
al principio tímida como un potrillo,
y una tercera y una cuarta,
izadas triunfalmente en la cima
de esas fuertes columnas, cada una
una Juno, serena en su fulgor,
una doncella gigante en su modesta gloria.
Si los humanos pudieran ser
tan intensamente íntegros, sin distracción, sin prisa,
¡veloces de puro
ímpetu inquebrantable! Si pudiéramos florecer desde adentro
sin entregar nada imperfecto ¡sin ocultar nada!





The Métier of Blossoming

Fully occupied with growing—that's/ the amaryllis. Growing especially/ at night: it would take/ only a bit more patience than I've got/ to sit keeping watch with it till daylight;/ the naked eye could register every hour's/ increase in height. Like a child against a barn door,/ proudly topping each year's achievement,/ steadily up/ goes each green stem, smooth, matte,/ traces of reddish purple at the base, and almost/ imperceptible vertical ridges/ running the length of them:/ Two robust stems from each bulb,/ sometimes with sturdy leaves for company,/ elegant sweeps of blade with rounded points./ Aloft, the gravid buds, shiny with fullness.// One morning--and so soon!--the first flower/ has opened when you wake. Or you catch it poised/ in a single, brief/ moment of hesitation./ Next day, another,/ shy at first like a foal,/ even a third, a fourth,/ carried triumphantly at the summit/ of those strong columns, and each/ a Juno, calm in brilliance,/ a maiden giantess in modest splendor./ If humans could be/ that intensely whole, undistracted, unhurried,/ swift from sheer/ unswerving impetus! If we could blossom/ out of ourselves, giving/ nothing imperfect, withholding nothing!



(de "This Great Unknowing", New Directions Publishing, 2000.)